Relacionar productividad y salario de los empleados está fuera de lugar

Relacionar productividad y salario de los empleados está fuera de lugar

ConfianzaCon esta frase encabeza un sindicato su último comunicado a los trabajadores de un ayuntamiento tras las declaraciones de ayer de Manuel Chaves sobre este tema.

Hay entidades locales, como Barcelona que ya han empezado a aplicar metodologías basadas en la gestión por objetivos, entonces ¿Qué problema hay en que la productividad del funcionario incida directamente en el sueldo percibido? Por qué ya hemos visto que el absentismo influye a la hora de recibir la «paga de productividad». Igual es que hay que cambiar ese concepto de productividad y señalar a todos y cada uno de los trabajadores públicos unos mínimos que cumplir como parte de su día a día. En definitva, que ya se están asumiendo retos de modernización en las entidades locales.

El caso es que «ligar la productividad de los funcionarios con sus salarios es una medida que ya está plasmada en el estatuto de los trabajadores públicos desde 2007» (vía «ya es hora que el funcionario funcione«):

Según el Estatuto Básico del Empleado Público, las retribuciones de los funcionarios se clasificarán en básicas y complementarias, y éstas dependerán de las características de los puestos de trabajo, la carrera profesional o «el desempeño, rendimiento o resultados alcanzados por el funcionario». Como explicaron los sindicalistas, lo que falta fijar son los porcentajes de la productividad y algo importante, quién medirá la eficiencia o eficacia de los trabajadores. «Los criterios que se tendrán que seguir deberán ser puramente objetivos y no políticos», matizó Palacios.

¿Qué os parece esta negativa de algunos sindicatos a avanzar en este sentido?

Sobre esto ya habló en mayo Alorza destacando que para llevarse a cabo una reforma basada en la gestión por objetivos la palabra clave en todo esto es «confianza». Y precisamente, la falta de confianza, es lo que alega el sindicato que ha hecho el comunicado causante de este post:

Poner en cuestión la productividad de los funcionarios es, en definitiva, dudar del trabajo que los trabajadores de la función pública desempeñan.

16 comentarios en «Relacionar productividad y salario de los empleados está fuera de lugar»

  1. Bueno yo como funcionario (profesor titular de Universidad) creo que el servicio público debe tener los mismo controles que cualquier trabajo, es evidente que tiene que haber incentivos a la productividad, lo que suele ocurrir es que no siempre la productividad se puede medir objetivamente, especialmente en un trabajo intelectual donde no se está en una cadena de montaje o es medible el número de pasos que damos. Los sindicatos también tienen que cambiar como la Administración. Te sigo, saludos blogueros,
    Paco Piniella

    1. @Paco Piniella, gracias por tu comentario. Cierto que con los intangibles la monitorización es complicada, pero siempre se pueden definir objetivos que de una manera u otra puedan «medirse» como artículos publicados, ponencias, rendimiento de tus alumnos, valoraciones de los mismos… Pero el principal problema que yo veo es la suspicacia del valorado hacia el que valora.

  2. @Haveloc, @jaime, @Oscar cierto que el sistema no acaba de funcionar bien. Qué no se cumple lo ya establecido y sobre todo la parte más «punitiva». No hay que ir hacia un sistema de recompensa por que hagan lo que tienen que hacer, sencillamente que si no lo hacen dejen de percibir en proporción. En el post hay un enlace en el que ya comento que hay sitios en que el absentismo, bueno el bajo absentismo es premiado. Y no es ese el camino. Hay que conseguir que el sector público funcione. La situación es que unos sindicatos expertos se enfrentan a gestores que no tienen ganas de confrontación permitiendo precisamente que muchos trabajadores se aprovechen del sistema en detrimentos de la gran mayoría que si que cumple con su obligación. Y se deberían de tomar medidas (existentes o nuevas) para que no hayan agravios para con ellos y con la ciudadania.

  3. Yo estoy con Jaime. No vaya a pasar lo que suele pasar en las grandes empresas, que se acaba primando al trabajador por hacer su trabajo. Para mí el problema que existe en la Administración pública es de tipo corporativo, y está directamente ligado a la eficacia y eficiencia del sistema. Todos tenemos amigos funcionarios y nos han contado miles de historias. Eso se tiene que acabar. primero, que se cumpla la ley. Y luego, si hay que primar, que se prime.
    ¿Cuanto nos ahorraríamos si en la Administración todo el mundo trabajara como en la empresa privada?

  4. Estoy de acuerdo en que los sindicatos siempre son refractarios a cualquier innovación. Pero no es menos cierto que el complemento de productividad existe desde hace muchos años y en la práctica, o es calderilla o es un complemento fijo más de la nómina no ligado ni a resultados ni (en ocasiones) a presencia. Por otra parte, ¿dónde está esa medida mágica de la productividad, la eficacia o la eficiencia?
    En mi opinión, antes de hacer leyes o normas nuevas deberíamos intentar aplicar las actuales o, al menos, pedirles explicaciones a los políticos de por qué no las cumplen ni las hacen cumplir.
    Para finalizar, con medidas de gobierno erráticas e improvisadas, sin fines concretos ni estables ¿cómo esperamos que las administraciones sean productivas? Física básica: si haces mucha fuerza pero no consigues movimiento, no has hecho ningún trabajo (T = F * L).

  5. La alta productividad ya se paga en la Administración Pública. A quien trabajo mucho y bien, se le recompensa… dándole más trabajo y cada cuatro meses una paga de productividad que en algunos casos te da para ir un día al cine con la familia, nada más.

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