Relaciones perversas ciudadano – AAPP en las Redes Sociales

Relaciones perversas ciudadano – AAPP en las Redes Sociales

El salto de las AAPP a las redes sociales es algo que ya es más que habitual. Es más, algunas se han lanzado sin más, otras por pertrecharse quizá demasiado, su salto queda como una mera simulación a la espera de dar el verdadero, mientras que otras muchas todavía no lo han hecho.

La relación que se establece entre ciudadanía y administración pública en las redes sociales es en ocasiones perversa. Por la parte de la administración (de su gestor de comunidades) el estar a la defensiva del ciudadano o utilizar los nuevos canales como un nuevo sitio desde dónde «emitir» puede ocasionar que la relación establecida no responda a las necesidades del ciudadano. Mientras, que por buena parte de estos últimos, el publicar en el muro de una página de Facebook o dirigir menciones en Twitter se convierte en activismo. Activismo que puede contemplarse como negativo en la mayor parte de las ocasiones. E intento explicarme.

Activismo negativo en cuanto a que muchas publicaciones o mensajes que se envían tienen la intención de hacer crítica, pero no constructiva. Normalmente usuarios vinculados con otras ideas y tendencias políticas a las que en ese momento están gestionando esa administración pública. Mensajes publicados normalmente de manera reiterada en todos los sitios posibles. Es decir, sin que sea un hilo adecuado a lo que se está discutiendo, o abriendo hilos de manera repetitiva. Sería algo así como hacer una mani de manera constante en un espacio digital.

Creo firmemente que la crítica es necesaria para poder mejorar. Y que en ocasiones es necesario insistir para que a uno le hagan caso.  Por lo tanto ese activismo, a pesar de ser negativo, es bueno. Ya que animan a los equipos de gestión a ganar agilidad a la hora de responder y, como no, a tener que pensar antes de contestar. Es, quizá, la parte más dura de gestionar un espacio digital de una administración pública.

Pero también hay otro activismo negativo en cuanto a que muchos otros mensajes son de alabanza a la gestión realizada. Alabanzas que no se suelen corresponder con algo que les haya afectado directamente, sino que responden directamente al mensaje publicado por el político al frente de la institución o de la consigna lanzada. Ya conocemos la facilidad en determinados espacios, como Facebook, que tienen los usuarios para hacer «me gusta» en algo. Pero en ocasiones excesivas alabanzas también pueden acabar deteriorando la percepción de los ciudadanos. Ya que en lugar de convertirse en prescriptores para otros usuarios, al hacer alabanzas exageradas o sin justificación, pasan a ser aduladores.

42 comentarios en «Relaciones perversas ciudadano – AAPP en las Redes Sociales»

  1. Hola Carlos,

    Muy interesante tu entrada. ¿Podría saber cómo llegaste a esta conclusión? Es que he incluido tu opinión en mi proyecto final de carrera y necesito poner cómo llegaste a la idea de que las relaciones entre AAPP y ciudadano son ‘perversas’.

    Muchas gracias,

    Saludos.

  2. Creo que esa relación no es perversa, simplemente es. Es la misma que se genera sin que haya implicada una red social. Es la misma que se produce a través de otros medios y circuitos. Es la misma (supongo) que se produce entre los usuarios (clientes) y cualquier empresa privada.

    Es cierto, existen matices que merece la pena valorar; pero si se pretende una relación «sincera» y «abierta», es lo que hay.

    Tanto las quejas que se reciban (por cualquier medio) como las alabanzas, no son objetivas. En todas ellas intervienen aspectos subjetivos, valorativos.

    Se trata de una relación compleja, independientemente del medio a través del cual se produzca.

    Buen post. Sugerente y reflexivo.

  3. Buen artículo. La gestión de las redes sociales de una AAPP es similiar a la de cualquier otra entidad u organización, incluso comercial, pero tiene ciertas particularidades que la hacen especial. Y una de ellas es que ya de entrada en nuestra comunidad vamos a encontrarnos con dos grupos de usuarios diferenciados: por un lado los «simpatizantes» del gobierno de la AAPP en cuestión, que nos pelotearán y que en ocasiones se van a convertir incluso en nuestros aliados; por el otro tendremos a la «oposición», a la que hay que tratar de una misma manera respetuosa y educada. Cuidado con estos últimos, porque a veces nos pondrán a un paso de caer en una crisis de reputación que puede llegar a ser peligrosa.

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