¿Tan buenos nos creemos? O ¿Los que se aprovechan son los empresarios?

En esas últimas horas estoy escuchando muchas cosas y leyendo muchas más sobre las declaraciones que ha hecho Celestino Corbacho sobre eliminar la contratación en origen. Han sido muchas las voces críticas con este intento de decisión por que por lo que parece ya hay cierta rectificación al respecto.

Se dice que tal decisión favorecerá las mafias, que miles de inmigrantes acabarán en la economía sumergida. Pero todo esto porqué. Pues parece ser que desde asociaciones agrarias ya están avisando que no si no es de esta manera no tendrán asegurada la mano de obra por que los españoles no quieren trabajar en ciertas cosas como la recogida del fresón o cualquier otra faena de temporada que haya en el campo.

Y yo me pregunto si somos tan buenos los españoles que no podemos hacer determinadas cosas ¿Se nos van a caer los anillos por tener que hacer determinados trabajos?

Bueno, no creo que sea esa la razón principal. Supongo que al ser trabajos de baja calificación y resultar especialmente duros y con el añadido que los salarios son realmente bajos es lo que hace que salga primero más a cuenta cobrar el paro o el subsidio consecuente que ir a romperse el espinazo.

Pero desde luego es lógico que si hay dos millones y medio de parados en España (entre inmigrantes y españoles) se evite traer a gente de fuera para que cubran necesidades laborales. A mi desde luego no me parece mal. Y si los de aquí no quieren aceptar esos puestos de trabajo, quizá los productores tengan que aumentar los sueldos para poder hacer más atractivos esos trabajos que parece que no quiere nadie y que sólo se cubren trayendo mano de obra barata. Igual es que esa actividad económica no está adaptada a su entorno.

Y si no les sale a cuenta cultivar el fresón en Huelva pues que se deslocalicen y lo hagan en el norte de África o en Sudamérica.

5 comentarios en «¿Tan buenos nos creemos? O ¿Los que se aprovechan son los empresarios?»

  1. @Pedro: Que yo sepa se pueden traer a los hijos hasta los 18. A los de 16 y 17 además se les da automáticamente el permiso de trabajo junto con el de residencia. O al menos esa era la propuesta. Pueden reagrupar a la familia núcleo pero no más allá. Puede que no sea la situación más ideal pero tampoco es que se juegue con ellos.
    Y creo que estás discutiendo o alegando cosas que se salen fuera del tema que ha empezado el hilo. Que no consideres adecuadas ciertas medidas estoy de acuerdo, pero que digas que ciertas cosas son de nazis te lo reprocho cien por cien. Ni hay exterminio, ni cámaras de gas, ni persecución racial… Se dan servicios y cobertura social (sanidad, educación) y al menos en mi entorno directo, y vivo rodeado de inmigrantes no es esa la sensación y desde luego no he visto que se les esté echando la culpa de nada.
    Si quieres ver más allá tú mismo, pero ten en cuenta que las percepciones son siempre diferentes en función de la persona.

  2. Pues si no es complicar la vida a un trabajador inmigrante, como hace Corbacho, prohibir el reagrupamiento familiar, es que hay muchos ciegos. Los trabajadores inmigrantes residentes no pueden, gracias a Corbacho, traer a sus hijos de 16 años o 17 ni a los padres. Es decir, un trabajador inmigrante no tiene derecho a convivir con su familia mientras trabaja aquí. Muy bien. ya se sabe los trabajadores no somos seres humanos con el derecho a vivir con los seres queridos. A trabajar, y al que no le guste, que se vaya. eso es de nazis. Y luego la otra, la directiva europea apoyada por Corbacho y por su gobierno que puede meter a un ser humano en centros penitenciarios durante más de 1 año y medio por el delito de circular por europa sin unos papeles, como si no tener un papel fuese un delito. ¿Que será lo siguiente? ¿Cuando los españoles hayan expulsado a los emigrantes quien tendrá la culpa del paro? ¿los gitanos?

  3. @Pedro: Yo no lo veo de la misma manera, no creo que esté metiendo miedo a la parte inmigrante de la clase trabajadora, sencillamente entiendo que si hay paro aquí es un poco ilógico que se siga contratando fuera. Y es aquí donde a las críticas que se han realizado a este intento de medida es dónde veo que determinados intereses, los grandes productores agrícolas no quieren subir los salarios de sus trabajadores. Puede que eso repercuta en su competitividad pero como digo si no es adecuado siempre pueden tomar otras opciones.
    Por lo que se refiere al tema de reducción de jornada laboral lo veo más que difícil de aplicar sin unos planes de reconversión a gran escala. Con grandes planes de formación y de reorientación profesional. Veo imposible que alguien que se ha quedado en paro del sector construcción, el más afectado en estos momentos, pudiera desempeñar con eficacia tareas aunque sólo fueran de un simple administrativo.

  4. Pienso que la contadicción no está entre «españoles» e «inmigrantes». Pienso que la contradicción está entre trabajadores y empresarios. Y no me parece nada bien que un ministro se dedique a meter miedo y a complicar la vida de un sector de la clase trabajadora, a los «inmigrantes». No me parece nada progresista asustar a los sectores más explotados de la sociedad. Y si sube un poco el paro no sería mejor repartir el trabajo (reducir jornada laboral o prohibir horas extras?). Y cuando me refiero a reducir jornada laboral, me refiero con el mismo sueldo y, por consiguiente, reduciendo un poco el beneficio empresarial. Es más fácil amedrentar a los «inmigrantes» y azucar conflictos étnicos entre la clase trabajadora («españoles» contra «inmigrantes»). Eso es lo que hace la derecha neofascista en Europa y este es el camino que parece tener el Ministro. Y ésto no es nada socialista ni progresista.

Los comentarios están cerrados